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53 pies: están avisando a la puerta

Por las mismas razones que desde AIMAS proponemos la generalización del contenedor de 53 pies en toda América desde la propiedad de los logísticos, ferrocarriles y transportistas locales y regionales, el especialista y empresario John D McCown de EEUU, fundamentó el por qué debe subirse el contenedor de 53 pies a los buques de ultramar.

Queremos agradecer a Emiliano Galli por habernos compartido a todo el público la traducción de la nota de John McCown ”Es hora de fortalecer nuestra estrategia marítima con metas tangibles”. Un planteo norteamericano publicada el 14/10/2021 en Tradenews. (Sugiero atenta y larga lectura)

La tenacidad y certera extensión de cada uno de sus párrafos, hacen recordar a la forma de escribir de uno de los Padres del Intermodalismo de EEUU, Frank J Richter, quien por tres décadas trató de explicar a los argentinos lo que hacían los estadounidenses en materia ferroviaria en general e intermodal en particular.

En EEUU no solo lo comprendieron, sino que también lo premiaron y dijeron a su viuda, Teresita Meana Richter, Argentina, que “su esposo, por 50 años, había dicho a la industria ferroviaria estadounidense lo que debía hacer”.

La Asociación Intermodal de América del Sur, AIMAS, fundada hace tan solo cuatro años, contiene el aprendizaje proveniente de Richter, pero fundamentalmente, el sentido pragmático de la cosa y que tanto él como Teresita contagiaron con su ejemplo por buena parte del Mundo: Conectar a los que tienen intereses en común; escuchar; aprender; transmitir.

El “a cambio de qué” es muy sencillo: En el instante en que por fin cada actor técnico, académico, empresarial, gremial, público comprenda que, simplemente, intermodal es solo comenzar a hacerlo, todos y cada uno comenzaremos a beneficiarnos grandemente.

El Código Aduanero Argentino, ya tiene sobre sí un dictamen administrativo que afirma todo lo que planteamos desde AIMAS sobre que hay que suspender o eliminar sus trámites para todo tráfico fluviomarítimo nacional de contenedores, pues es una barrera anticonstitucional que genera muchas otras trabas operativas y económicas.

¿Por qué razón fue presentado por la Asociación que no tiene ningún buque ni contenedor? Pues porque cada socio, cada colaborador, cada interesado que participa o participará sí tiene intereses sobre el asunto.

La mirada filosófica del fenómeno intermodal, es que hay que arrancar, tal como dice John D McCown en su artículo: La voz de JFK diciendo que estarían en la Luna antes de 1970 era todo lo que necesitaban para comenzar a hacerlo.

Brasil ya tiene semirremolque de 53 pies, contenedores de ese tamaño y corredores ferroviarios aptos para doble estiba. La pregunta no es “¿cómo fundamentaron esa decisión con datos técnicos?”, sino que la certera interpelación es “¿cómo es que un Mundo CASI entero sigue operando con un contenedor tan pequeño y que está en pocas manos?”.

Quien lea la nota de McCown, encontrará números que, a la lectura de nuestra cultura técnica sugeriría que no hay que tener ni marina mercante ni contenedor de 53 pies, pero quien comprenda de economía, de geopolítica, de instantes en la Historia, comprenderá que nos está diciendo lo que el Mundo entero tiene que hacer.

Si San Martín y Bolívar hubieran calculado la TIR de sus objetivos, jamás hubieran realizado sus campañas contra el Imperio.

Esperar que otros intenten es lo que hace la diferencia. Sabemos quién va a ir delante, pues ya lo está haciendo.

César Meireles, hasta 2020 presidente de Asociación Brasilera de Logística y hoy de la organización Brasil Export, dijo en una reunión conjunta con Chile Transporte, ABOL y AIMAS, que “el semirremolque de 53 pies y su contenedor serán la pieza clave para la integración logística de América del Sur”. McCown, aunque basado en EEUU, nos está diciendo lo mismo.

Desde AIMAS decimos que Intermodal nace en el primer instante en que un agente comercial de un ferrocarril, aerolínea, naviera, puerto o centro de transferencia, comprenda que el camión podría ser su mayor y más extensivo cliente para ir de Temuco a Valparaíso, o de Tacuarembó a Tijuana. Quien lea a McCown, verá ratificada la proposición.

Bahía Blanca, Octubre 15 de 2021

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